Una mujer que se había quedado viuda
La
viuda iba todos los días al cementerio
Se
ponia a llora y decía,
hay Juan cuanto te echo de menos
hay Juan cuanto te echo de menos
Juan que
sola me has dejado
y que de problemas tengo,
mas lloraba y mas cosas
decía un dia la ve el sepulturero
y se da cuenta que en la lapida
no pone Juan , pone Antonio
y que de problemas tengo,
mas lloraba y mas cosas
decía un dia la ve el sepulturero
y se da cuenta que en la lapida
no pone Juan , pone Antonio
Un dia
se acerca el sepulturero y le dice,
señora en la lapida no pone Juan
señora en la lapida no pone Juan
La
mujer le contesta,
es que el no podía tener nada a su nombre
es que el no podía tener nada a su nombre
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